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martes, 1 de abril de 2014

PERU: A INTRIGAR, SE HA DICHO...

La campaña mediática desatada en el Perú contra la primera dama, Nadine Heredia, poco tiene que ver con el machismo peruano, aunque éste exista. Ese machismo no parece tan decisivo desde el momento en que ha sido Ollanta Humala, presidente peruano y esposo de Heredia, quien ha dicho de la campaña mencionada que es "abusiva", "grosera" e incluso "asquerosa". Según el presidente, se usa el pretexto de que Heredia es primera dama para neutralizarla en sus méritos como líder del Partido Nacionalista Peruano. Así, Humala considera que de lo que se trata es de descalificar el mérito, descalificación que es algo frecuente en Latinoamérica. Lo cierto es que, según explicara insistentemente en Ria Novosti la periodista peruana Vicky Peláez, Nadine Heredia tiene criterio propio, independiente, que es lo que la sociedad latinoamericana difícilmente perdona.
      Si fuera asunto de machismo, hace algún tiempo habría sido repudiada la candidata de la derecha conservadora, Lourdes Flores, quien le pisó en una elección los talones al ex presidente Alan García. Una dama no incomoda demasiado, si tiene "fina estampa" y hace lo que corresponde: Violeta Chamorro en Nicaragua o Mireya Moscoso en Panamá no incomodaron por ser mujeres. Y si no la tiene, esa "finura", sino que golpea, con mucho de lumpen, tampoco es forzosamente negativo: es así que Keiko Fujimori, hija de Alberto Fujimori, alcanzó casi la mitad de los votos (poco más de 48 %) al enfrentarse electoralmente con Ollanta Humala. ¿Machismo? Ninguno, cuando se trató de la hija de Fujimori (y nadie impidió tampoco que tiempo atrás la ex esposa del mismo Fujimori, Susana Higuchi, incursionara en política).
     Tampoco se sostiene que el Perú vea con malos ojos que una familia, la Humala-Heredia, se "instale" en el poder, suponiendo que fuera el caso. Si lo fuera, habría que pedir por igual que Keiko -una administradora de empresas- y su padre salgan de escena.- con todo y séquito de intrigantes ¿Hay que quejarse de la "reelección conyugal" -ni siquiera en la agenda, por el momento- pero no de la dinastía del sol naciente? En todo caso, es al machismo de Keiko al que habría que cuestionar, y no que Ollanta Humala sea el supuesto "cosito" de Heredia. Humala dió la cara por su esposa -quien tiene buena formación profesional- sin ningún machismo. Así que, con toda la herencia colonial y en nombre de todas las dependencias -que es que habló "la esposa del presidente", convertida supuestamente en "presidenta del esposo"-, hay que hacerle la vida imposible al criterio propio y al profesional. Se le hizo lo mismo a Ollanta Humala, por cierto, desde la soberbia limeña que desprecia por igual la independencia que a la provincia que habla quechua (como la de Ayacucho...) y al migrante llegado a la capital, sea con apellido Humala o con el de Heredia.

A VER A QUÉ HORA

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