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sábado, 24 de septiembre de 2016

¿LINDO Y QUERIDO?

En La doble vida de Jesús, novela de Enrique Serna, el personaje se detiene un momento en medio de la vorágine y piensa: "quizá lo más sensato fuera renunciar a la candidatura, poner la humilde papelería que Remedios había desdeñado y ser un oscuro comerciante, ajeno a las luchas sociales, como millones de mexicanos honestos, pero indolentes, que habían seguido el ejemplo de las avestruces, una alternativa cómoda mientras la balacera no los obligara a desenterrar la cabeza para correr por su vida".
      El clima descrito es, en palabras de Serna, el de un "fascismo anárquico" que alguna relación guarda al mismo tiempo con las creencias predilectas del narco, descritas en Las caricaturas me hacen llorar ("Por nuestros hijos"). Las familias decentes y las de los narcos tienen en común un valor-refugio, el de la familia misma, que explica que "le entren" para mantenerla: "hijo responsable que siempre llevó dinero a su casa y nunca bebía más de la cuenta, padre de familia ejemplar, buen marido, hermano generoso, hombre de hogar a quien le gustaba departir con los suyos, Félix Gallardo solo descuidaba a los suyos para exportar unas cuantas toneladas de coca a Estados Unidos. Pecata minuta, si tomamos en cuenta que arriesgaba la vida por sus bodoques", ironiza Serna. Curiosamente, se tocan los de arriba y los de abajo -o al menos, los del medio- en la defensa de una "institución" -en realidad descompuesta por dentro, con mucha frecuencia, aunque aquí sí opera la omertá a los tres chiles- convertida en santuario, trinchera, "mi casa es mi fortaleza", etcétera, ante una sociedad inexistente, salvo que se trate de agarrar lo que sea y como sea, si es necesario, transgrediendo todo, absolutamente todo (menos la sagrada familia, se entiende). "La desintegración familiar, que tanto alarma al Vaticano, escribe Serna,seguirá cundiendo en los países ricos de Occidente, donde la prosperidad favorece el individualismo, pero jamás llegará a Sicilia ni a Culiacán, pues la concordia familiar es indispensable para llevar los negocios de la mafia por buen camino".

NACIDOS DE ESTE LADO

 Parte de la libertad de los libertarios es despertar lo que cada uno es en su inalterable naturaleza: un aspirante a salvaje, un pandillero...